Hoy hemos vuelto a trabajar sobre la autoestima y nos hemos dado cuenta de que nos cuesta mucho mantener nuestra seguridad cuando se trata de nuestra familia, especialmente cuando los chicos ya son grandes y conforman sus propias familias. Vuelven a casa con los nietos y estamos deseando que se encuentren bien, y a veces, nos olvidamos de nosotras mismas para atenderles. Luego, si se genera algún conflicto en la forma en la que tratamos a los niños o alguna diferencia de opiniones con los esposos y esposas de nuestros hijos, entonces nuestra seguridad se tambalea y nos cuestionamos todo lo que hemos dicho y hecho.
Necesitamos seguir trabajando en nuestra autoestima para enfrentarnos mejor a estas situaciones difíciles. Nuestra forma de percibir las cosas, influye en como reaccionamos antes las diferentes situaciones. Al percibirlas de forma objetiva, nos ayuda a responder más adecuadamente. Pero si, nuestra respuesta es excesivamente crítica, entonces nuestra respuesta no se adecua a las necesidades de la situación.
También hoy hemos buscado en nuestra memoria elogios que nos han hecho a lo largo de la vida y nos ha resultado difícil encontrarlos. Muchos de ellos no acabamos de creernoslos y hemos visto que de haber creído las cosas, la vida nos habría resultado más fácil. Por eso vamos a trabajar durante la semana en buscar momentos adecuados para decirnos a nosotras mismas lo mucho que valemos. Parece muy difícil, a ver que tal sale.
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