Durante las sesiones hemos trabajado duro en relación a nuestra autoestima y lo seguiremos haciendo. Vamos descubriendo que la percepción que tenemos de nosotras mismas va fluctuando en función de las cosas que nos van pasando. Hay muchas situaciones en la vida que nos duelen, y hacen que nuestra autoestima y estado de ánimo se vengan a bajo. Las situaciones que más nos generan sufrimiento son: la muerte de nuestros familiares y vecinos, la partida de nuestros hijos (dicen médicos y psicólogos “nido vacío”), las enfermedades. Sabemos que el devenir de estos sucesos no depende de nosotras, ni podemos evitarlos, son ley de vida. Lo que si depende de nosotras es la voluntad y la fuerza de salir adelante. Todas aquellas pequeñas cosas que hacemos día a día para superar las adversidades y al mismo tiempo superarnos a nosotras mismas (cantar, reír, hablar con las vecinas, tener hobbys, caminar y disfrutar del amanecer, regar y cuidar el huerto, etc).

Nos sentimos contentas en el grupo. Tenemos un espacio para compartir lo que pensamos, sentimos y lo que nos ilusiona.

Nuestra tarea para la siguiente sesión es terminar el árbol de los elogios, cuando lo tengamos listo subiremos las fotos al blog para que podáis verlo.