miércoles, 1 de diciembre de 2010

El proyecto llegó a buen puerto

Nos ha sabido a poco, pero hemos descubierto que tenemos muchas ideas. Somos capaces de desarrollarlas y de ponerlas en práctica.

Han sido 8 semanas de nnononnonononono, pero al final SI! y con ganas de repetir. Hemos tenido una profesora maravillosa y unas alumnas todavia mejor. Hemos conseguido darnos cuenta de que tenemos muchos valores, entre ellos la creatividad. Aunque tarde hemos descubierto la importancia de valorarnos a nosotras mismas.

Estamos muy orgullosas de vivir en el medio rural y no envidiamos para nada a las mujeres de la ciudad.

Vamos a pensar en todo nuestro patrimonio, el cual no conocemos tan bien como querriamos y lo vamos a poner en valor. Y vamos a trabajar a partir a de ahora, para que los niños de la Parrilla también lo conozcan, lo respeten y lo quieran como nosotras.

lunes, 29 de noviembre de 2010

Compromiso

Hoy nuestro compromiso es seguir con actividades para no perder contacto y no anquilosarnos. Hacer algo provechoso tanto para nosotras como para el resto del pueblo.

Compromiso para ponerse de acuerdo que es lo más importante. Continuar con todo lo que hemos dicho y hecho durante este curso. Animándonos a hablar y a opinar más y también escuchar la opinión de las demás.

Este proyecto nos ha permitido conocernos mucho mejor, pero sobre todo de forma más profunda. Nos hemos descubierto alguna arruga más, pero son sólo una muestra de lo que hemos vivido y disfrutado en nuestras vidas. Se nos ha hecho muy corto, nada pesado, y nos encantaría poder continuar. Esperamos poder encontrar más oportunidades.

Y ahora si Pitu nos deja, nos tomaremos un cafetito con pastas. Ya Basta!!!! Dejanos en paz, no nos hagas trabajar más Pitu!!! no es broma!!!!

jueves, 25 de noviembre de 2010

Somos más creativas de lo que nosotras pensabamos

Hoy hemos dado rienda suelta a las ideas y a la creatividad. A pesar de nuestra resistencia por hacer las actividades que Romina nos traía, al final siempre acabamos haciéndolas y muy pero muy bien. Somos capaces de eso y de muchas otras cosas.
Nos hemos percatado que la innovación y la creatividad son recursos que sin darnos cuenta aplicamos todos los días y nos ayudan a resolver muchos problemas que se nos presentan en la vida cotidiana.
Hacer los dibujos nos ha permitido reírnos y olvidar el miedo al ridículo. Por un momento, la vergüenza y el temor a equivocarnos, se quedaron apartados en un rincón. En ese rincón, donde deben estar para permitirnos pasarlo bien y dejar volar nuestra imaginación.
Cada una de nosotras tiene muchos propósitos para el próximo año. Ahora, tenemos el reto de buscar los propósitos que nos unen como grupo para llevarlos adelante. Vaya tarea que nos ha dado Romina. Nos imaginamos que todos los grupos estaréis en las mismas, cada uno en su pueblo buscando como continuar esto que hemos empezado. Lo que más nos gustaría es poder volver a encontrarnos para seguir compartiendo experiencias.

Queridas compañeras, nos ha encantado tenerlas en nuestro pueblo. Al final hemos superado el reto que teníamos como grupo de ser anfitrionas y de mostrar y explicar el hermoso patrimonio de nuestro pueblo, San Esteban de la Sierra.

Recibir todo nuestro cariño.

Las chicas de San Esteban

Rescatando recuerdos y tradiciones de Los Santos


El recorrido empezó en el ayuntamiento. Las mujeres destacaron que la biblioteca actual era la escuela a la que ellas asistían, los hombres tomaban clase en otro edificio que en aquel tiempo estaba a las afueras del pueblo.

En la plaza donde se encuentra el monolito con el escudo de Los Santos antes se realizaban las comedias, alguna de ellas también recuerda los bailes.


Un elemento que destacaron como parte del patrimonio material es la arquitectura de las casas hechas de piedra. Las casas siempre tenían el corral delante y la vivienda detrás. El corral se utilizaba para el ganado y también para guardar las herramientas del trabajo del campo. Berna nos enseñó la casa de sus abuelos que aún guarda la arquitectura tradicional. La cantería de piedra sigue siendo un elemento característico de las casas de más reciente construcción, aunque muchas de las mujeres manifestaron su desagrado por alguna construcción que rompe por completo la tradición arquitectónica de Los Santos. Uno de sus mayores deseos es que se respete y se adapten las nuevas construcciones a las formas tradicionales. Aunque las cosas han cambiado y al no haber ganado ni arados, ya no es necesario tener corral.

Uno de los lugares que más deseo tenían de mostrar fue la Iglesia de San Bartolomé. Durante la visita nos comentaron que son las mujeres las que se encargan de limpiarla. Para las labores de limpieza han organizado una rotación de dos mujeres al mes por cada uno de los barrios del pueblo. También destacaron su participación y colaboración en las fiestas religiosas.


El paseo por los castaños centenarios estuvo amenizado por anécdotas de la infancia y la juventud de las participantes. Este paraje fue lugar de encuentro y de juego durante su infancia. Algunas recuerdan que sus madres ya les contaban que también jugaban en este lugar. Cuando eran pequeñas venían aquí a espiar a las parejas de novios, que se sentaban bajo los castaños. Y durante su juventud ellas también venían con sus novios a (y futuros maridos) a caminar y hablar bajo los castaños. Todas ellas ríen al recordarlo y comentan que es un lugar muy bonito y muy romántico.

Ellas, dicen, son personas que han estado (y están) en contacto con la naturaleza, ésta ha sido muy importante en sus vidas ya que en sus tiempos de ocio siempre han preferido ir a dar una vuelta.

Una de las tradiciones más importantes de Los Santos ha sido el cultivo, el hilado y la confección del lino. En todo este proceso las mujeres han sido partícipes. Este oficio lo han aprendido de su familia pues en el cultivo y el procesamiento del lino tanto las mujeres como los hombres tenían funciones definidas. Entre las tareas destacaron la de los hombres apretando el lino con el mazo de madera para quitar la cáscara, y la de las mujeres en el proceso de blanqueado. El hilado de lino y la confección de prendas han sido tareas específicas de las mujeres. Aunque alguna de ella recuerda a su abuelo hilando lino. Durante la sesión Presentación hizo una magnifica demostración del hilado del lino. En este proceso los dedos no paran de moverse: las yemas de los dedos índice, anular y pulgar de una mano aprietan las hebras del lino para fijar el grosor del hilo y con la otra se va engrosando el “carrete” de hilo. Si uno no conoce esta actividad parece que es fácil de hacer, pero a la hora de la verdad requiere de años de dedicación. A ellas les preocupa que esta labor se pierda, pero son conscientes de que la juventud ya no va dedicar su tiempo a eso. Sin embargo hay excepciones: La hija de Presentación quiere que su madre le enseñe a hilar. Y la hija de Asunción ha hecho una toalla de lino muy bonita. Por eso son optimistas, y están seguras de que siempre habrá quien mantenga y transmita esta tradición.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

La recta final

Pitu, cada día nos metes más miedo; pero hemos visto que después del susto inicial, al final resulta que podemos hacer todo lo que nos proponemos (aunque siempre es Pitu la que propone) y nosotras primero decimos nonoonnononononono, y luego al final acatamos y resulta que nos sale todo estupendo.

No sabemos que tenemos tanta creatividad, la llevamos años demostrando con nuestras labores y otros trabajos artesanales. Siempre vamos con el no por delante.

Aquí nos cuesta muchas veces comenzar o pensar en los ejercicios, y los hacemos mejor en casa, pero la verdad es que muchas veces nos coarta el grupo, incluso sin darnos cuenta.

y con esto ya está bien, ahora a por las pastas, gentileza de nuestras amigas de Los Santos. Gracias chicas.

Nuestras tradiciones



Durante la semana Tere se encargó de colgar fotos en facebook – perfil Endrinal Altoalagon- para que sus compañeras y resto de grupos pudieran verlas. Lo más interesante y relevante del material visual es que dio la pauta para hablar sobre las tradiciones y las fiestas del pueblo. Se habló sobre las bodas tradicionales cuya celebración duraba tres días. Las bodas se celebraban en las casas de los padres de los novios .El primer día de celebración se iba a comer huevos duros –que los invitados de la boda regalaban a la novia-, el segundo día se llevaba a cabo el ritual religioso y la comida, y el tercero los novios iban al campo a arar la tierra, “los dos mano a mano y codo a codo trabajaban la tierra”-, esto dice Amalia. Era un ritual para comprender “que para que las cosas funcionen en un matrimonio el trabajo es de dos”. La boda de Amalia todavía se realizó de forma tradicional. En las de Tere y Toñi estos ritos ya no se realizaron.

Una de las tradiciones que ha desaparecido de las fiestas de Endrinal es la representación de comedias y sainetes en el Mensegal. Amalia también recuerda que en la noche de San Juan un hombre de Endrinal conocido con el mote del “tío peltrecho” contaba a todos los espectadores con gracia y salero los sucesos más relevantes acaecidos en el pueblo durante el año. Desafortunadamente al desaparecer este maravilloso orador ya no se han vuelto a realizar los sainetes. A todas les resultó muy interesante conocer esta tradición pues no sabían de ella.


Los de Endrinal tienen la fama de ser fiesteros y de tener un largo mes de fiestas. Por ello existe, entre los del pueblo, el dicho popular de: “Entre San Juan y San Juanín / Entre San Pedro y San Pedrín / Y el Cristo del Humilladero / Un mes de Fiestas”.


También cabe destacar que se habló de los motes que tenía cada una de las personas. Entre los motes de los pueblerinos existían lo de: Toti, Verde, Maolopo, Fraile, Gallina, Gila, Peltrechos, Demonia, Conejo, Quico-eh, Gorrina, Camioneta, Tripita, Bartolín, Collares y muchos más. Resultó curioso y simpático hacer un recuento de los motes del pueblo. Los motes, a veces tenían que ver con el oficio, pero otras por las características de las personas o anécdotas divertidas . Los motes en Endrinal no han desaparecido, pero sí que han desaparecido muchos oficios, como el de herrero, carpinteros y otros oficios vinculados a la ganadería como los que realizaban la “parada de sementales”.


Al recordar el patrimonio natural del pueblo, se habló del río Alagón (que baña muchos de los pueblos de la Sierra) y de las fuentes que tiene Endrinal, y se hizo un recuento de las mismas. Entre éstas aparecieron: la fuentita, la fontanilla, el maíllo, el caño de merino, la fuente del moro, la fuente del Valle del Mensegal, la granja, el regato de caganchas, el jaraíz, el pilón, la fuente de las naves.



Al finalizar la tarde visitamos la Casa de la Cultura Tradicional de Endrinal. Una casa típica que muestra los objetos que acompañaban a la vida cotidiana de los habitantes de la zona. Allí, Toñi nos hizo una demostración de los juegos de antaño.

I-ENCUENTRO 2010. Mujer Rural. Valorando lo Nuestro



lunes, 22 de noviembre de 2010

Nuestra historia en imágenes

Hoy hemos repasado todos los elementos patrimoniales que nos enriquecen, dibujándolos en un mural.

También hemos aprovechado para ver los resultados de nuestros trabajos individuales. Pili nos ha traído unos vídeos fantásticos en los que entrevista a su padre preguntándole por su vida en Tudela de post-guerra, por el salón de baile y por todas las cosas maravillosas que hizo por este pueblo.

Menchu nos ha traído unos vídeos grabados por su hija en una feria rural celebrada en Cantabria, su lugar de origen. Aquí tenéis un vídeo en el que se ven todos los artefactos con los que se trabajaba en el campo hasta hace muy poco tiempo, y que todas conoceréis:


Después hemos visto los vídeos de La Componedora mientras Arabia y Pili nos contaban sus historias, sus habilidades y la vida tan dura que han llevado.

Antes de acabar, hemos bajado a los archivos que están bajo la biblioteca y bajo nuestra sala de trabajo. La bibliotecaria nos ha explicado como se organiza toda la información y nos ha enseñado los legajos más antiguos que poseen de la historia de Tudela. Una autentica maravilla.

Tradiciones de La Parrilla

La Cantarada

El novio que se echaba novia en La Parrilla, al tercer domingo que la visitaba, tenía que pagar La Cantarada, que consistía en pagar un dinero para comprar una cantara de vino que se bebía entre todos los mozos del pueblo. Si no la pagaba, es que no quería a la chica lo suficiente y ya no se le dejaba volver al pueblo.

Julia

Las mejores hojuelas del mundo

El blog de La Parrilla lo escriben día a día las chicas de La Parrilla, pero hoy es distinto. Hoy soy yo, Pitu, quien tiene que contaros lo maravillosa que ha sido la tarde de este miércoles.

Al llegar a La Parrilla ya me estaban esperando las chicas para enseñarme todo ese patrimonio del que me habían hablado el día pasado. Comenzamos el paseo por La casa de los mayores, de espaldas al Antiguo Ayuntamiento, seguimos por la Iglesia y de allí a las bodegas. En cada rincón me contaban sus historias, de como la torre se resquebrajo y de como la reconstruyeron, de las meriendas que se hacían, y de los incendios que acabaron con muchas de las viviendas. Seguíamos el paseo y seguíamos viendo pinares por los cuatro costados, La Parrilla está maravillosamente rodeada de un pulmón de pinos y un manto de níscalos (este año más que nunca). Nos acercamos a la cuesta de los moros y recordamos los tiempos de las coladas en el arroyo, !cómo costaba subir la cuesta de regreso, cargadas con la colada!. Hablamos de toros y encierros, y de como muchos de ellos vinieron a morir a La Parrilla sin esperarlo.

El paseo concluyó en el lugar más importante de La Parrilla, la Ermita del Santo, levantada sobre las ruinas de la casa dónde creció el protomártir del Japón. Contamos a los 26 franciscanos que sufrieron martirio el 5 de febrero de 1597, y como Pio IX los canonizó el 8 de junio de 1862. Imaginamos al pequeño santo correteando por las calles de La Parrilla y jugando en sus pinares, como más tarde lo harían ellas y sus hijos. La devoción que se siente en La Parrilla por San Francisco es indescriptible, es algo tan suyo como las propias calles, o el pozo junto a la Ermita, dónde El Santo salvó la vida a un niño sin apenas tocarlo.

Y una vez acabado el frió paseo, a reconfortarse con un café y las maravillosas hojuelas que nos ha preparado Julia :) fantástico final para un día perfecto.


Si alguien quiere saber más sobre San Francisco de La Parrilla, aquí tenéis un link estupendo:




La Parrilla sigue viva


Hoy si que hemos estado valorando lo nuestro, esta vez centrándonos en nuestro entorno, buscando el patrimonio de nuestro pueblo. Hemos recordado cosas muy importantes y muy bonitas, y de paso, gente que no es originaria de La Parrilla como Petri ha aprendido muchas cosas que desconocía de La Parrilla.


Al principio, cuando Pitu ha puesto un panel tan grande para rellenarlo, pensábamos que no seriamos capaces de llenar tanto espacio, pero al final se nos ha quedado pequeño. Nos ha satisfecho mucho recordar todas estas cosas y vamos a seguir recordando otras con los deberes que tenemos para la semana. La clase ha sido muy amena y muy productiva.


Cada semana que pasa aprendemos un poco más la importancia de valorar lo nuestro. Reconociendo nuestros méritos y habilidades, y los logros que hemos conseguido a lo largo de nuestras vidas.


La semana que viene le pondremos vida a toda esta teoría, visitando todos los lugares y contando todas las historias.

Un gran paseo por la historia de Sardón de la mano del Titi


Por un despiste no hemos recorrido las calles de nuestro querido Sardón, pero hemos tenido una visita que nos ha valido muchísimo más.


Hoy ha estado con nosotros Teófilo Posadas, o el Titi, como nos gusta cariñosamente llamarle. A pesar de sus más de 80, el Titi conserva la jovialidad, la buena memoria y las ganas de disfrutar de un chaval. Además de contarnos la historia del viejo Molino, de como pasó de mano en mano (desde un antiguo diputado de las cortes asesinado a sangre fría, a su propia familia) y de uso en uso (desde fábrica de papel a merendero, pasando por fábrica de luz), nos ha hablado también de viejas historias del pueblo y sus habitantes.


La historia de su molino es rica en anécdotas, pero más aún lo es la suya propia. Peón de obra, taxista y repostero, el Titi ha sido un gran empresario y sin duda un orgullo para Sardón. Con su buen humor y sus ganas de trabajar, ha sido y es un ciudadano ejemplar y un estupendo amigo.


Titi, muchas gracias por venir y contarnos todas tus historias.

domingo, 21 de noviembre de 2010

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Rescatando nuestra gastronomía, y abriendo boca...

Hemos tenido la visita de Enrique Coraza –técnico de patrimonio de la Asociación de Ayuntamientos de Alto Alagón-. Junto con él, hicimos el recuento del patrimonio histórico y natural que tenemos en San Esteban. Enrique también nos hizo algunas sugerencias y recomendaciones para preparar la vista guiada que haremos el día sábado a todas las participantes del I Encuentro Valorando lo Nuestro. Queremos que todas os llevéis una grata impresión de nuestro pueblo y que tengáis ganas de volver. Para nosotras, organizar y realizar la visita nos supone un gran reto como grupo.




Durante la sesión, también hemos expuesto recetas tradicionales de San Esteban. La cocina y los procesos tradicionales de preparación han sido parte esencial de nuestra vida. Nos sentimos afortunadas de haber recibido este legado y de trasmitirlo a nuestros descendientes.

Carmen es Sevillana. Lleva más de 30 años viviendo en San Esteban, ella se dio a la tarea de tomar nota de la receta de las “patatas meneás”. Es un plato típico de la sierra y que le enseñaron a ella cuando vino a vivir a San Esteban. La receta tradicional dice Carmen, “es menear las patatas dentro de un puchero de barro o porcelana con una cuchara de madera”. Las patatas hechas de esta manera tienen otro sabor, ahora que se trituran en la licuadora, dicen “no saben igual”. Aunque se hacen mucho más rápido.

Benita, nos ha contado la receta de la limonada. Esta bebida es muy típica para los días de fiesta. Benita la aprendió de sus padres, pues recuerda que la hacían para compartir con los vecinos y las personas que venían a pasar las fiestas en San Esteban. Afortunadamente, comenta el grupo, la tradición de compartir la bebida y comida con toda la gente el día de fiesta es una tradición que aún se conserva en el pueblo.

Isabel Lorenzo compartió con el grupo la receta de las rosquillas. A ella se la enseñó una amiga. Al hablar de las rosquillas, las mujeres recordaban que el día de la “pedida”. La familia del novio llevaba rosquillas como un presente a la novia y su familia.

Rosa que ha confesado ser una golosa, nos escribió la receta de los saca trapos. Al igual que las perronillas y las rosquillas el secreto de los saca trapos, comenta Rosa, “es que la masa este en su punto”. Para hacer los sacatrapos un elemento fundamental es utilizar una “cañita”. Rosa la trajo y nos hizo junto con Consuelo una demostración de cómo se hacen estos dulces.

En el recetario no podían faltar las perronillas, Isabel Labrador nos compartió la receta. Para Isabel el truco de las perronillas está en la masa y para que se mantengan ricas hay que meterlas en un puchero de porcelana. Antes se llevaba la masa preparada al horno de leña y ahí se hacían las perronillas. Ahora se hacen en los hornos de casa, pero muchas de ellas las compran en las panaderías.

Isabel Hernández nos explicó como se hace el cocido de garbanzos. Los garbanzos de la villa son los mejores para hacer el cocido. Isabel nos comenta que cuando era pequeña el cocido llevaba menos “relleno”, no había tanto dinero para ponerle jamón, oreja. Los días de fiesta se le ponían un poco de carne pero no la cantidad que se le pone ahora. En su casa la carne que había se repartía por igual a todos. Aunque llevaba poca carne, el cocido está muy rico y se disfrutaba mucho. Isabel nos comentó que a sus hijas que viven en Bilbao les encanta el cocido y que también lo hacen muy rico.

Isabel Espinosa nos dio la receta de los nuégados. Parte imprescindible de esta receta son las obleas. Isabel nos comentó que cuando era niña había una señora que las hacía. Le encantaba que la mandaran a comprar, pues la mujer que hacia las obleas les regalaba a ella y a todos los niños los restos de obleas que salían del borde de los moldes. La mujer de las obleas también hacia las obleas para la iglesia.

A Manuela le sale muy bien el anisete, así que nos contó como lo hace. El anisete es una bebida para acompañar los dulces (perronillas, sacatrapos, rosquillas, etc.) Es imprescindible en las fiestas. Manuela nos dijo que el truquillo es poner el azafrán junto con la naranja y el anís, que reposarán durante una semanita con el aguardiente.

Seguimos rescatando recetas y tradiciones…

Cerramos la tarde cantando la "canción para San Esteban"

En busca de nuestro patrimonio

Hacer un inventario del patrimonio no fue nada fácil. En un principio fue complicado hacer el recuento. Del patrimonio material que tiene Los Santos, destacamos la iglesia y dentro de ella, la pila de bautismo, la cruz de plata –muy deseada y que se ha tenido que proteger-, y el retablo. También la ermita y la figura de la Virgen del Gozo, el parque temático, la plaza de toros –quizá una de las más antiguas-, el ayuntamiento, los lavaderos, las cinco cruces, la fuente del guijo, el portalito, el monolito, la fuente de San Francisco, entre otros. Destacamos la piscina, el colegio y el parque de los niños como parte del patrimonio público del pueblo.

En la lista de elementos de patrimonio inmaterial destacamos la tradición en producción textil de Los Santos, siendo ésta la elaboración del lino y de la lana. La mayoría de nosotros conoce este proceso muy bien, pues en algún momento de nuestra vida lo han realizado. Otro elemento de nuestro patrimonio es el oficio de los tejedores, quienes realizaban un tipo de tejido o punto que se llamaba “de ojo de perdiz” y “de limón”. Para nosotras estas dos formas de tejidos son especialmente bonitas. Desafortunadamente, poco a poco va desapareciendo el oficio de tejedor y con ello estas dos formas de hacer tejidos.

Asunción nos ha comenta que su abuelo fue tejedor. El telar de su abuelo se lo vendieron a otra familia y aún está en el pueblo. Esperamos que el próximo jueves podamos conocer el telar del abuelo de Asunción.



Hemos hecho un repaso de las tradiciones más importantes del pueblo. Sin duda alguna las fiestas de San Bartolo –patrón de Los Santos- son las más importantes. Berna recuerda que para este día tan esperado se preparaba en su casa “morcilla reciente de cabrito y cordero”, luego se iba a comer en el “tejar” y después a ver los toros que se hacían en la plaza. Algunas de nosotras recordamos que para hacer los toros la plaza se cerraba con carros que funcionaban como una especie valla y en los cuales se subía la gente a verlos.

Durante las fiestas también se realizaban obras de teatro. La mayoría de nosotras hemos pertenecido a grupos de teatro. Frecuentemente presentábamos comedias en Los Santos y en otros pueblos. Presentación recuerda con agrado la actuación que tuvieron en la escuela oficial de idiomas de Salamanca. Nos inquieta que se pierda esta tradición de Los Santos, pues actualmente en las fiestas ya no se realiza ninguna obra. Parece que las cosas van cambiando y a la gente les interesan otras cosas. Nosotras hemos disfrutado el hacer teatro y recordar nuestras puestas en escena nos llena de ilusión.

Como parte de la sesión de refuerzo, el próximo jueves visitaremos la iglesia, los castaños milenarios, un barrio de casas antiguas y, si tenemos suerte, visitáremos a uno de los últimos tejedores que quedan en el pueblo. Presentación nos escribirá todo el proceso del lino y si tiene tiempo también el de la lana.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Valorando lo nuestro: Descubriendo el patrimonio inmaterial de Endrinal

Valorando lo nuestro: Descubriendo el patrimonio inmaterial de Endrinal: "Hemos empezado la sesión visitando la iglesia de San Pedro. Para nosotras los elementos más importantes de la iglesia son el pulpito, la pi..."

Nuevas formas de hacer las cosas

Hoy hemos empezado el Módulo 4 y hemos hablado de creatividad. Ha sido algo muy novedoso y nos ha resultado difícil enfrentarnos a esta nueva forma de pensar. Vamos a intentar abrir la mente a nuevas iniciativas y a organizar nuestro pensamiento creativo para desarrollar nuevos proyectos.

Hoy hemos visto que acostumbramos a seguir patrones rutinarios, sin ni siquiera darnos cuenta. No importa la rutina para ciertas cosas, ya que a menudo nos facilita la vida, pero si queremos darle un toque nuevo a nuestros problemas es necesario romper la rutina y solucionar los problemas con creatividad.

y ahora a prepararse para la excursión del día 20

Descubriendo el patrimonio inmaterial de Endrinal


Hemos empezado la sesión visitando la iglesia de San Pedro. Para nosotras los elementos más importantes de la iglesia son el pulpito, la pila bautismal y el retablo.
























Tere nos ha comentado que Amalia fue la encargada de pulir la piedra –abujardar- del pulpito y de la pila bautismal.





Al volver a la biblioteca leímos en el libro “Entresierras por los Caminos Históricos” la información que había sobre la iglesia.

El recuento del patrimonio inmaterial nos ha resultado especialmente difícil. Ana Belén y Toñi conocen pocas tradiciones de Endrinal. Tere intenta recordarlas pero comenta que “Amalia es la que sabe más de todas esas cosas”. Pero insistiendo un poco y haciendo memoria logramos encontrar algunos elementos interesantes vinculados a nuestra gastronomía.



Ana Belén comentó que uno de los platos típicos de Endrinal es la “sopa Asunción”. Esta sopa conocida y degustada por toda la gente de Endrinal fue una receta inventada por Asunción –la madre de Tere y Amalia, participantes del grupo-. Al parecer en una fiesta, Asunción mezcló ingredientes que tenia a la mano (patatas fritas, guisantes, carne de cerdo) y el resultado fue una sopa que a todo el que la prueba le encanta. Hoy la receta sigue siendo un platillo del menú cotidiano de la gente del pueblo. Dos y hasta tres generaciones ya han continuado con su elaboración. Este es un ejemplo de la creación y transmisión de un “saber popular”.

También se señaló la receta de la morcilla y el farinato con calabaza, que son poco frecuente en los pueblos cercanos a Endrinal. Tere comenta que su madre hacia la morcilla con calabaza, ella sigue haciendo la misma receta de su madre. Dice que es riquísima: habrá que probarla.

A la gente de Endrinal les gusta mucho la fiesta. Quizá por esto explicamos que sea el único pueblo de la sierra que en la semana de Pascua se come dos días en hornazo. Se come el domingo antes del lunes de aguas y también, como es tradición en muchos lugares de la provincia de Salamanca, durante el mismo lunes de aguas.

Respecto al patrimonio natural, el agua es uno de los recurso más preciados por la gente de Endrinal. A mucha gente le gusta venir y llevarse agua de sus fuentes. Nuestra agua es muy rica y tiene un sabor muy bueno.

En la fuente Tere recuerda lavar las tripas para la matanza. Ana Belén y Toñi comentan que algunas mujeres aún las siguen lavando. La matanza sigue siendo una de las actividades tradicionales de Endrinal, aunque cada vez hay menos gente que la realiza continúa siendo una tradición importante.

Además del agua, están los árboles frutales: los manzanos, los perales, los ciruelos, el membrillo, las endrinas.

Al final de la sesión acordamos que durante la semana recopilaremos información sobre las fiestas, leyendas, motes y oficios de Endrinal.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Reflexiones sobre nuestros árboles genealógicos


Nos ha resultado muy interesante hacer el árbol. Nos gustaría utilizar algún programa informático para realizarlo. Al visitar el blog del proyecto descubrieron que las mujeres de Olivares han puesto un link de un programa informatizado para realizar el árbol, así que en algún rato libre quedaremos para hacerlo.

Al explicar nuestros árboles genealógicos nos ha parecido interesante indagar sobre los oficios de nuestras madres y abuelas. Toñi nos comentó que sus bisabuelos trabajaban en la calera que había antes en Navaredonda. Los oficios de nuestras madres estuvieron ligados al entorno donde vivían. Para las de la ciudad (el caso de la madre de Ana Belén) el trabajo se llevaba a cabo en la industria (calzado) o como personal de servicios. Mientras, las mujeres que se quedaron en el pueblo se dedicaron a las labores del hogar y a colaborar en las tareas del campo.


Tres de nosotras comentamos que venimos a vivir a Endrinal porque nos casamos con hombres del pueblo. Ello, generó un debate sobre lo común que es que las mujeres acaben viviendo en el sitio de donde es originario el marido. Pensamos, que aún sigue siendo así, aunque van cambiando las cosas. Creemos que la decisión de vivir en un sitio la sigue marcando el trabajo y en el caso de nuestros maridos, el trabajo lo tenían en Endrinal. Eso sí, las que no somos de Endrinal estamos muy contentas de vivir aquí.

Un saludo,

Toñi, Amalia, Flori, Ana Belén y Tere

lunes, 8 de noviembre de 2010

Un recorrido por nuestro Olivares


Hoy hemos hecho todo un recorrido por nuestra historia, nuestro patrimonio, nuestras leyendas, recuerdos... todo.

No sabíamos que teníamos tantísimo patrimonio, recuperando paso a paso todos los elementos hemos recordado momentos muy bonitos y hemos sido capaces de llenar todo un panel de elementos patrimoniales.

También podemos hablar de compromiso, el compromiso de recuperar todas las tradiciones que podamos antes de que se sigan perdiendo. Ya hemos empezado a recuperar piezas del patrimonio perdido como las palabras alóndiga (casa dónde pernoctaban los indigentes) y cagigales (árboles parecidos a las encinas y robles).

Esta semana vamos a tratar de recuperar la receta de los mantecados adoberos y el arrope. Trataremos de recuperar los elementos de la matanza tradicional y la semana que viene haremos juntas chorizos y queso.

Nuestros árboles genealógicos

Hoy hemos traído nuestros árboles genealógicos. Realizarlos, no ha sido una tarea fácil pues implicó hacer un esfuerzo por recordar nombres e información que teníamos un poco olvidada.

Algunas de nosotras hemos ayudado a la familia en el molino, en el campo, en la preparación de banquetes de boda o en las labores de la casa. Al casarnos, dejábamos de realizar muchos de los “oficios de soltera o de familia” para colaborar en los del marido. En el caso de la hermana de Berna, tuvo que dejar el oficio de modista cuando se casó para ayudar a su marido en la panadería.
Asunción nos comentó que desde que era pequeña su gran sueño era ser peluquera. Y a pesar de la oposición de su padre y sus hermanos, ella trabajó para pagarse el curso, y logró ser peluquera. Fue una pena que su padre no le hubiera visto desarrollar el oficio por el que tanto luchó.


Carmelina tuvo el privilegio de conocer a una de sus bisabuelas y recuerda las travesuras que ella y sus hermanos le hacían cuando eran niños.

Rosalía y María son bisabuelas. Al explicar su árbol genealógico, descubrieron que las dos tienen once nietos, nueve mujeres y dos varones. Para sorpresa de todas también coinciden en tener cada una dos bisnietas.

La mayoría de nuestros hijos viven fuera pero les encantan el pueblo. Muchos de ellos tienen casas y cuando el trabajo se los permite se escapan a Los Santos. Los nietos vienen al pueblo mientras son pequeños, pero cuando crecen van haciendo su vida y amigos en la ciudad y vienen un poco menos.

Hemos disfrutando de las fotos que María y Presentación nos han traído. En estos retratos, conocimos al abuelo y a la bisnieta de María. Presentación nos trajo una foto de su padre.

Los valores que hemos recibido

Para nosotras la educación es importante (y vital) en la construcción de los valores y los roles de género. Pensamos que aunque el entorno es clave en la trasmisión de valores, la familia es aún más significativa. Por ello, creemos que en nuestros roles de madres, hijas, esposas y hermanas tenemos la responsabilidad y el reto de decidir los valores que deseamos trasmitir a nuestra familia.

Hemos resaltado el valor de la generosidad como un pilar importante en nuestras vidas. En la reflexión realizada en la sesión nos percatamos que este valor se ha trasmitido, y permanece en cada una de las generaciones. Algunos de los valores los hemos aprendido del trabajo, siendo éstos la prudencia, la empatía y el autocontrol. Consideramos que el haber vivido fuera del país nos ha permitido adquirir y desarrollar la valentía y la empatía. Las situaciones a las que hemos tenido que hacer frente en la vida nos han ayudado a que florezcan y se incrementen nuestras fortalezas personales.

El patrimonio de San Esteban de la Sierra

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Nos hemos sentido encantadas de dialogar sobre el patrimonio de San Esteban. Hablar de nuestro pueblo nos hace sentir orgullosas de nuestras raíces y de lo que somos. Encarna, Carmen y Candida no nacieron en San Esteban pero sienten un gran cariño por él.

Elegir los rincones más bonitos del pueblo no ha sido una tarea fácil. Para la mayoría de nosotras la iglesia “es muy especial pues parece una catedral en pequeñito”. Para Carmen y Encarna los paisajes y la naturaleza son lo más bonito que tiene San Esteban. A Isabel Espinosa le encanta la gente de su pueblo porque es maravillosa. A Rosa le gustan muchas cosas de San Esteban pero destaca el ayuntamiento (que antes fue calabozo y hasta una carnicería). Isabel Lorenzo destacó lo bonita que es la puerta de la iglesia. Para Manuela el rincón más bonito es el puente romano.


De nuestro patrimonio inmaterial destacamos la gastronomía. Hemos hablado de los platos tradicionales del pueblo y de los métodos que se han utilizado para su elaboración. Aunque ya no realizamos los mismos procesos de preparación seguimos haciendo perronillas, hornazos, sacatrapos y otras delicias, siempre de forma casera. Hoy en día: “con las estufas y hornos de ahora todo se hace más rápido, aunque no tienen el mismo sabor”.

Destacamos como parte de nuestro patrimonio más preciado las canciones de la sierra. Tenemos un gran número de canciones recopiladas que nos encanta cantar en las fiestas y ocasiones especiales.

Aún nos queda por hablar y descubrir más elementos de nuestro patrimonio inmaterial: la tradición oral, las fiestas y tradiciones, la danza y música, las artesanías. Seguimos en ello.
Un saludo,
Rosa, Benita, Manuela, María, Isabel Espinosa, Encarna, Carmen, Isabel Labrador, Isabel Lorenzo, Isabel Hernandez y Consuelo.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Recuperando nuestra cultura


Hoy nos hemos sentido muy emocionadas porque hemos estado recordando muchos momentos de nuestra infancia, de las enseñanzas de nuestros padres y de los lugares en los que hemos crecido. Somos una generación que no hemos sabido transmitir tan bien como lo hicieron nuestros abuelos y nuestros padres. Sin embargo, hay otras tradiciones que hemos creado y transmitido en el seno de nuestro hogar, convirtiéndose hoy en nuestro patrimonio familiar.

No pensábamos que teníamos tanto patrimonio en Tudela hasta que hemos empezado a repasar todas las cosas que nos gustan. Aquí hay mucho agua y tenemos un pueblo con una geografía única, lo que hace que tengamos un patrimonio natural enorme. Eso unido a nuestro patrimonio artístico lo hace un pueblo precioso. Pero lo mejor es todo eso que no se puede tocar, todo el patrimonio inmaterial que nos rodea en las historias, cuentos, gastronomía, festivales, etc.

Casi todas nosotras hemos trabajado desde los 12-13 años, y recordando el patrimonio de Tudela hemos decidido recuperar los oficios que conocimos de niñas y que se han ido perdiendo.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

Del archivo histórico a las nuevas tecnologías


Es un placer descubrir nuestras raíces a través de los nombres e historias de nuestros antepasados. Desgraciadamente no siempre es fácil recordar nombres y fechas pero con la ayuda de los archivos y de la informática se puede redescubrir nuestro pasado de un modo sencillo.

Hoy hemos encontrado en los archivos civiles de La Parrilla, el acta de nacimiento del padre de Paela, con los nombres de sus abuelos maternos y paternos y la fecha de nacimiento de su padre (abuelo de Paela). Esto demuestra lo fácil que es encontrar a nuestros antepasados en los archivos históricos.

Una vez que tenemos los nombres, cuesta un poco organizarlos, pero con dibujos sencillos o el uso de herramientas informáticas como http://www.myheritage.com/ es mucho más sencillo.

martes, 2 de noviembre de 2010

Nuestro Pueblo, Sardón de Duero



Hoy hemos dedicado la tarde a recorrer nuestro patrimonio, tanto material como inmaterial. Hemos recordado viejas historias y tradiciones, algunas aún vivas y otras que se están perdiendo. Para acabar hemos tratado de hacer un resumen en papel confeccionando un trabajo con fotos, leyendas, platos ricos, artesanía y canciones de nuestro pueblo.

Hoy ha sido importante aprender a valorar nuestro patrimonio, tratando de mantenerlo vivo. Para ello, hay que recuperarlo y transmitirlo, por lo que tenemos como deberes recuperar algo de nuestras tradiciones que esté a punto de perderse, como la canción de nuestro pueblo o algunas de sus leyendas y dichos populares.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Nuestras cajas




En nuestras cajas hemos traído muchos recuerdos. Todos ellos representan nuestros logros, nuestro paso por los países donde hemos vivido.
Recordamos con alegría las amistades y los buenos momentos que hemos vivido en Suiza y Venezuela. Vivir lejos de España, de San Miguel y de nuestra familia ha sido duro, aún así, nos hemos sentido satisfechas y recompensadas con todas las personas maravillosas que hemos conocido. Como a todos los que emigramos y pasamos tiempo lejos, nos sentimos "que ya no somos ni de aquí, ni de allá”. Aunque siempre seremos de San Miguel y un poco de todos los sitios donde uno deja afectos y trozos de su vida.

Reflexiones sobre género y valores







La reflexión sobre las diferencias de género con el grupo fue muy interesante. Algunas de nosotras destacamos el triste papel que tienen las mujeres para fomentar el machismo. Otras personas del grupo no teníamos muy claro que las mujeres seamos las que lo propiciemos, sin embargo tenemos claro que hemos padecido el machismo de alguna manera… y lo contamos diciendo: “no nos quedó más remedio que obedecer a nuestros padres y a nuestros maridos”.

Ahora las cosas no son como antes, la mujer se ha liberado mucho. Una muestra de ello es que “ahora ya no tienen que hacer luto”. Y es que algunas de nosotras nos pasamos buena parte de nuestra vida vestidas de negro para guardar luto.

Al final hemos concluido que la trasmisión de los valores no sólo ha sido fruto de la relación familiar. También las experiencias vitales nos han proporcionado valores. Muchas de nosotras consideramos que las circunstancias a las que nos hemos enfrentado han hecho que afloraran fortalezas que desconocíamos. Nuestras hijas y nietas también nos han enseñado muchas cosas sobre las mujeres y la equidad de género que no conocíamos.

Rastrear el origen de los valores no resultó ser un ejercicio fácil, aunque sí muy interesante, pues implicó la reflexión y el análisis de momentos trascendentes en nuestras vidas.

Nacimos entre los árboles de cerezos e higueras, y aquí somos felices








Este miércoles hemos disfrutado mucho de la sesión. Nos ha encantado hacer nuestro árbol genealógico y hablar de nuestra familia.

Para nosotras los valores han sido trasmitidos principalmente dentro de nuestras familias. La motivación por aprender, el estudio y la capacidad de superación han sido valores que nos han trasmitido los padres. Las madres, por otro lado, nos inculcaron la capacidad de llevar la casa y de realizar diversas labores. De nuestras familias hemos aprendido el valor del trabajo. La posguerra fue un período que marcó nuestras vidas, “ante las necesidades de aquella época nos tocaba trabajar a todos”.

En esa época el ocio significaba cambiar de actividad (del campo a las labores de casa), pero en ningún caso tumbarse en el sofá sin hacer nada. Y pensamos que desde la llegada de la Televisión la gente convive menos y disfruta menos de hacer otras cosas.

En relación a los árboles genealógicos, sólo tres de nosotras recuerda los bisabuelos. Por otro lado, ninguna aún tiene bisnietos y estamos deseosas de tenerlos.

La mayoría de nosotras tenemos los hijos fuera del pueblo. El hecho de que salieran, se formaran y no volvieran al pueblo ha sido, creemos, un indicador de éxito. ¿Lo será? Nos lo preguntamos por qué vemos que también se puede trabajar y progresar en San Esteban. Aquí también hay jóvenes que han decidido quedarse y están haciendo cosas muy interesantes –e importantes!

Creemos que muchas veces la gente se va del pueblo porque hay muy pocas oportunidades. Y Rosa comenta que “en la ciudad se desprecia al pueblo, pero luego todos comen y viven un poco de él”.

Ciertamente, el término “rural” ha sido menospreciado, sin embargo para todas nosotras es un orgullo “ser de pueblo”. Y es que algunas de nosotras lo decimos bien claro: “Nacimos entre los árboles de cerezos e higueras, y aquí somos felices. Estamos agradecidas de lo que tenemos aquí”.

Las cosas han ido cambiando poco a poco...




Este jueves visitamos la ermina de Endrinal. Una vez allí Amalia nos comentó como subía a los andamios para poder realizar el trabajo de restauración. La ermita es uno de los lugares más bonitos que tenemos en Endrinal. Por eso, cuando nos visiten nuestra compañeras de proyecto el día 20 de este mes estaremos encantadas de enseñársela.

Además del paseo, estuvimos reflexionando sobre las diferencias de género. Hemos debatido sobre la importancia que tiene el contexto en la asignación de roles. Hablamos que aunque tenemos la fortuna de que nuestras parejas nos ayudan, en el entorno rural aún se ve mal que los varones hagan determinado tipo de tareas (limpieza de la casa, compras de víveres, cocinar, etc). Por ello creemos que aún existe machismo y que a veces la mismas mujeres lo refuerzan entre sus parejas y sus hijos.

Coincidimos que las cosas han ido cambiando poco a poco... Y hemos concluido que nosotras somos también las responsables de que haya una transformación en los valores...

Saludos,

Toñi, Amalia, Ana Belén y Tere

Más vale tarde que nunca.











No ha sido fácil hacer nuestras cajas. Reflexionar sobre nuestros logros y sobre aquellos objetos que pueden ser representativos y significativos ha sido una tarea que nos ha llevado tiempo, pero al final lo hemos logrado.

Ana Belén ha sido la primera en mostrar su caja. Nos ha enseñado uno de los primeros libros que le regalaron sus padres y que guarda con mucho cariño, es la obra en comic de “Don quijote de la Mancha”. También trajo un chupete y una foto de su hija Inés.

Amalia nos ha traído el mazo. Sí, se trata de ese objeto con el que logró resaltar la piedra de la Ermita y del cual ya se ha hablado.

Tere, nos enseñó fotos y con ellas nos hizo un emotivo repaso de los momentos importantes de su vida.

En la caja de Toñi había muchas cosas: fotos de sus hijos, y algunas labores realizadas por ella misma.

Hemos disfrutado y compartido anécdotas emotivas de nuestras vidas.

Un saludo,

Ana Belén, Amalia, Toñi y Tere